La ONG Paicabi, tras los últimos acontecimientos ocurridos a partir de las movilizaciones sociales y la instalación del Estado de Emergencia en diversas regiones del país, declara lo siguiente:
1.- Apoyamos el ejercicio del derecho a movilizarse de la ciudadanía frente a la serie de injusticias y abusos al que se ven sometidos cotidianamente y que constituyen el eje de sus demandas. En el eje del descontento está la instalación de un modelo político y social que no pone al centro a la persona y privilegia a la minoría que tiene mayores recursos y controla las decisiones que nos afectan a todos.
2.- Para quienes trabajamos en la protección de la infancia más vulnerable en nuestro país, aquella que sufre diariamente una violencia institucional que se refleja en la pobreza, la falta de un acceso digno a los servicios de salud y la carencia de una educación de calidad, nos parece preocupante y rechazamos la instalación de un lenguaje beligerante por parte de las autoridades, particularmente por el Presidente de la República, quien han llegado a sostener que nos encontramos en un estado de guerra, lo que sirve para justificar el uso excesivo de la fuerza para contener la legitima protesta social en la que participan también niños, niñas y jóvenes que solo están ejerciendo su derecho a manifestarse frente a lo que consideran injusto.
3.- Los niños y niñas están viendo, sintiendo y compartiendo las mismas preocupaciones y temores que sus padres, madres y demás familiares. Los efectos que pueden tener en ellos la actual situación del país son múltiples e implican diversas consecuencias. En lo evidente e inmediato está el aumento de la ansiedad asociada a la incertidumbre y la modificación de sus rutinas, lo cual puede conllevar cambios en sus estados de ánimo, emocionalidad más frágil e irritabilidad entre otros. A esto, se agrega el temor y los miedos inespecíficos y específicos, que pueden aparecer como ansiedades ante la separación de sus cuidadores, temores que se habían superado y que vuelven a emerger, o expectación ansiosa frente al mañana. Y a mediano o largo plazo, el eventual efecto que tendrá en el repertorio de sus experiencias personales, donde las escenas experimentadas, vistas y escuchadas, comienzan a ser parte de las posibilidades de su vida, y por lo tanto, a la percepción de su mundo se agrega la violencia social e institucional, el desamparo y la impotencia ante la injusticia.
4.- Como ONG Paicabi, institución que trabaja hace 23 años en la reparación y restitución de derechos de los niños, niñas y jóvenes que han sufrido las más graves vulneraciones y maltratos, queremos expresar nuestra solidaridad con las personas que han decidido movilizarse frente a un Estado que no responde ante sus demandas y que no garantiza el mínimo de los derechos sociales que les permitirían acceder a una vida digna. Hacemos un llamado a quienes nos gobiernan a reflexionar y tomar medidas urgentes que vayan en esa dirección, colocando en el centro del debate la dignidad de las personas y particularmente de los niños, niñas y jóvenes.
5.- Finalmente, hacemos un llamado a los niños, niñas y jóvenes, y particularmente a sus padres, madres y cuidadores para que tomen las precauciones necesarias en orden a no exponer su integridad en situaciones extremas. Tenemos plena conciencia respecto al peligro que significa tener una masiva presencia de fuerzas policiales y efectivos militares en las calles, por lo que es necesario recurrir al autocuidado para no lamentar situaciones irreparables como las que ya se están conociendo.
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